El sabor de aquel durazno

Una hora atrasado, luego de la locura por llegar, por estar puntual.

Sin embargo esa hora era una sospecha. Algo importante de dificil olvido se cocinaba detras de esa oscuridad en un escenario repleto de equipos. La calma se mantenia alterada de gritos , de pedidos, de ansiedades.

La tribuna albergaba mas de 35 mil personas. Las edades...tantas....desde chicos que no superaban los 19 hasta adultos de mas de 60.

En el campo Vip el clima era de nostalgia, alli estabamos los testigos de la genesis. De la historia completa que en minutos se desplegaria en un escenario iluminado de mil colores.

Eran las 22...Una extraña magia comenzaba a envolvernos

Y de pronto aparecio, y nos llevó...nos paseo por esos reconditos caminos del recuerdo.

Desde este presente hasta aquel primer paso. Y en cada parada una emocion contenida y de pronto ya no se contienen mas... en el escenario estan tocando Rezo por vos y Spinetta está con Charly. Me siento colapsar, infartar, salirme de mi cuerpo y entender que estoy presenciando la historia. Alli estan ellos, los padres de la bestia.

Y asi siguio, con Pescado, con Invisible y ese recuerdo de aquel recital en el Luna Park cuando presentaron Charco y yo hacia mis primeras salidas, en una ubicacion de sillas anaranjadas un compañero de cole y yo vimos aquel recital y luego corrimos porque la policia nos corrio a la salida. Esta vez estaba sin temores de carreritas destempladas, embriagandome de ese Jugo de Lucuma del brazo de mi amiga Analia que se vino de Mexico para esto.

Y siguio, y siguio, y se hicieron las horas felices y seguiamos temblado y el flaco seguia prometiendo y Almendra aparecio y Fermin mostraba las manos.

3 y 20, se fue la vida , paso la magia, desenvolvio texturas, excito sentimientos, trajo recuerdos y llamo lagrimas, lagrimas de jade, lagrimas que corrieron en ese valle interior de las cosas que jamas se olvidan.

Spinetta en Velez, 4 de diciembre de 2009. Historia argentina.