sábado, 28 de enero de 2012

Puede la crueldad ser dirigida? La prueba de Milgran

Hasta donde podemos ser manipulados, quebrados en nuestra conviccion para hacer algo que creemos seriamos incapaces?.. Hasta donde una imagen de autoridad puede decirnos que hacer sin que nosotros tengamos una duda. Esa pregunta se la hizo Stanley Milgran, sicologo de la Univ de Yale, y sus resultados fueron aterradores. Corria el año 1963. .
Stanley Milgran se propuso saber cuanta maldad podemos experimentar. Con que docilidad seguimos ordenes de alguien a quien reconocemos un signo de autoridad. Puede ser tanto un uniforme o un guardapolvo. Y que tan poco cuestionamos esas ordenes .
El experimento consistia en voluntarios que recibirian 4 dolares cada uno y trataria sobre la memoria y el aprendizaje. Lo que no sabian era que todo era una farsa y que algunos actores participarian del experimento. Los roles serian de un cientifico, quien dirigiria el experimento y una alumno. Los voluntarios nada se imaginaban de todo este montaje . Una maquina que enviaba impulsos electricos castigaria al alumno cada vez que su memoria fallara. Se probarian los imperativos morales, ya que serian los voluntarios quienes accionarian la maquina .Ellos solo habian visto como la victima habia sido sujeta a una silla y conectada a electrodos. Pero luego ya no la verian, aunque escucharian sus gritos cada vez que fallara en la prueba. Esta consistia en una serie de preguntas que la victima deberia memorizar. Al principio todo iria bien, pero de pronto la victima fallaria en sus respuestas. Entonces el voluntario enviaria una pequeña descarga electrica. Las preguntas seguirian y los fallos tambien, las cargas serian cada vez mas poderosas, hasta que la victima empezaria a gritar. La prueba seguiria y ante cada duda del operador, el cientifico lo instaria a seguir, explicandole la importancia del experimento. Seria una orden firme, dada con seguridad, que no debian desobedecer. Los fallos seguirian y las descargas aumentarian. La victima ya no soportaria y pediria clemencia, piedad, solicitando abandonar el experimento. Pero el cientifico insistiria. Y la voluntario continuaria en la creencia de que la ciencia se lo agradeceria, sin medir el daño que le estaba ocasionando a otro ser humano. Lo haria preocupado, inquieto, sin demostrar placer. Pero obedeceria ante la orden del cientifico quien le diria.."Ud. debe continuar..." Lo harian, sabiendo el dolor que estaban inflingiendo.
Ningun participante aplico mas de 300 voltios. Algunos recien al llegar alli se detuvieron y cuestionaron el experimento.
El 65% de los voluntarios completo el experimento.. Luego de oir los gritos de dolor de las victimas y pedidos de piedad. No antes.
La maquina jamas envio una sola descarga. Era un truco.
En el año 1979 pude ver una pelicula francesa que se llama I...como Icaro...alli una escena recrea una sesion completa de este experimento. Y hace muy poco se repitio la prueba. Los resultados no variaron.
Que intento probar esta experiencia?. Nuestro grado de violencia desplegada ante una orden que creemos legitima?. Podria compararse esto la obediencia debida o las ordenes cumplidas durante el nazismo?
Habra sido este un estudio eticamente comprometido?
Tal vez lo haya sido, pero lo que sabemos hoy luego del mismo, es preocupante.



sábado, 21 de enero de 2012

Hacia Bariloche. La ciudad.


No era una foto fija salida de un western spaghetti. El viento no agitaba carteles de cantinas abandonadas, ni las calles polvorientas tapaban el sol. Ninguna depresion me asalto al llegar. La gente no lloraba en las esquinas y la vida parecía esperanzada. Bariloche , algo mas calma, seguia asi como la recordaba. No parecía desolada y los peores pronósticos nunca se cumplieron. Aunque la lucha contra el volcán aun sigue. Pero habia mas bares, un teatro, algunos nuevos complejos de cabañas y la actividad de la construccion que no parecia detenerse. Dicen que muchos se fueron. Seguramente fue asi, dicen que podia verse en la matricula de las escuelas. El lugar no era la imagen otrora de la pujanza, pero tampoco del caos. El clima, mas calmo, nos dio en 12 dias, solo uno de llovizna y otro de ceniza. Pero en ambos pudimos hacer cosas. El resto de la estadia, un sol potente nos acompañaba haciendo que algunos dias fueran transparentes. Fueron dias de muchas caminatas, vimos senderos antes de piedra y hoy de cenizas, las flores un poco mas opacas y las copas de los arboles que tambien habian perdido parte de su verdor. A todo el paisaje parecía que le faltaria un poquito de contraste en el Picassa. Nos soprendia la cantidad de israelies, los pocos brasileños y las ofertas. Y el calor que de pronto se transformó en frio y alli supe que no todos habian cargado la suficiente ropa de invierno. Pero estaban las ofertas y las aprovechamos. Camperas para todos a un precio bastante acomodado para lo que es Buenos Aires. Se notaba que la ciudad había bajado sus precios, una empanada se conseguía por $4,5 (en B.A no bajan de $5,50) y los precios del super eran muy parecidos a los del chino de casa. Las 10 o 12 cosas que suelo comprar para preparar mi precario arte culinario estaban en Bari igual que en Lomas y mas baratos que en San isidro. Lo comenté y me miraban raro. Parece que se pierde cierta perspectiva cuando no se sale del lugar donde uno vive. Buenos Aires es la ciudad mas cara del universo comparando precio-calidad y Bariloche no me parecia tanto. Que el colectivo es mas caro, si lo es. Pero sin querer parecerme al Indec, la diferencia se notaba. Una coca en cualquier bar de morondanga de Lomas o Capital vale 14 mangos, en Rapa Nui vale $10. Un pancho y una coca puede estar en la Av. Corrientes a 20 mangos y en Coquito frente a la estacion de San Isidro a $17. En la cabañita del arroyo Lopez, escuchando la musica del agua correr y a los Red Hot Chilli Pepper, a $15. Cuando sali de Bue el kg de banana valía 12 mangos, en La Anónima salia $8. Parece increible, pero es asi... El tema helados es notable...los mejores helados parecen estar alli, y los mas baratos. Una heladería en BºLas Victorias, alejada del centro, ofrece un helado increible a $50 el kg. Pero como para pelearle y ganarle por afano a Persico y a Freddo. Y también sorprendieron las 3 pizzas a $90. Sorprendieron por lo barato y por lo horrible, desbarrancando a la otrora reconocida pizzeria Cocodrilo a la peor profundidad de la mala calidad. Volviendo al tema vestuario, terminando las vacaciones me atrevi a comprar una campera de soft shell a un valor 30% menos que lo que se consigue en Bue. Un dato aparte es la "falta" de nafta, otro fantasma que no conoci. Siempre cargue YPF Super...a lo largo de todo el viaje y durante mi permanencia en Bariloche. No tuve ningun problema con eso. Y así, con el tanque lleno, me entregué confiado a la Bustillo. Como para empezar...

miércoles, 18 de enero de 2012

Hacia Bariloche. 2° parte.


La casa era tal cual la habíamos visto en internet. Nos alegró saber que no nos habíamos equivocado. Dos pisos, coqueta, de color beige, de madera y con comodidades para 5. Tenia las típicas ventanas barilochenses, esas que diseñan los arquitectos que nada saben de airear casas y creen que porque es Bariloche siempre deben estar clausuradas. Como si los médicos no sugirieran ventilar los ambientes en toda estación. Pero ellos no lo saben, son arquitectos y mientras entre en el presupuesto todo vale. Que las ventanas no se abran..apenas unas pocas y chiquitas lo hacían, era preocupante, ya que el día amaneció con un pronostico de 30°. Una barbaridad para la ciudad y para las construcciones de pocas ventanas y ninguna aislacion térmica.. La casa en la parte alta era un horno de pizza y manteníamos la esperanza de que la noche trajera algún alivio. Creo que no faltara mucho hasta que un ejercito de instaladores de aires acondicionados invada la ciudad haciéndose un gran negocio. Todo cambia y lo antes impensado hoy es realidad. Ya vimos que en verano puede superarse fácilmente los 30°. Y luego bajarse a 9°, así como una gran broma de la climatología. Como sabía de estas situaciones habíamos sido muy estrictos en lo que los chicos cargarían en los bolsos. Todos llevábamos ropa de invierno y verano...o al menos eso creía . Los pesos estuvieron medidos severamente, antes de salir le había preguntado a cada uno cuanto pesaba y me miraban con cara sorprendida. También calcule cada bolso y así mantuve la seguridad del viaje al no sobrecargar mas de lo que el manual del usuario del Clio recomendaba..
Ademas le había cambiado pastillas de freno y regulado las luces, aunque esto ultimo lo hicieron espantosamente.. Trate de que la seguridad fuera primordial y así tuvimos un arrivo tranquilo y cómodo a la ciudad del clima enloquecido. Pero los 30° no me preocupaban...la playa estaba a solo 50 metros....me preocupaba lo que no vimos ni ese día ni varios que le siguieron... la ceniza...ausente sin aviso en una mañana de sol que recordaba las mejores postales barilochenses....
La cosas parecia prometedora... (continuara)

martes, 17 de enero de 2012

Hacia Bariloche


Bariloche resiste. Ha tenido algunas bajas, pero aun resiste. Un volcán intento oscurecerla, opacarla, quebrarla. Mucho de sus habitantes sufrieron esos síntomas. Otros los combatieron con recuerdos de playas de aguas celestes y cielos límpidos y con fotos que colgaban en redes sociales para que jamas olvidemos lo que había detrás de la ceniza.. Un amigo aceptaba ese dolor y le parecía bien comentárselo al mundo. Cosa peligrosa cuando la ciudad vive de su imagen y es pasto fácil para los medios que comercializan tragedias sin importarles quienes las padecen. Sufrir era legitimo, pero contarselo a todos no me parecía conveniente. Cada uno lo vivió a su manera. Para mi, que vivo a 1800 km fue suave, aunque doloroso cada una de las imágenes hartas de fotoshop que me contaban una ciudad sin remedio. Por cada foto opaca, se publicaban fotos coloridas. Así como había quien le parecía bien sostener esa imagen de caos, asi también había otros que se resistían. Viven de la imagen..no hay lugar para llorar sobre la leche derramada, pensé. Aun contra los pronósticos mas agoreros planee mis vacaciones alli. Sabia que podría arrepentirme si cada día era una lluvia de cenizas, pero sin embargo confiaba en el sol, en el verde y en mis ganas. No iba solo, los que me acompañaban lo hacían a conciencia. Lo primero fue conseguir una casa, y allí la cosa se volvía tragicómica. Algunos parecían que vivían en el mejor de los mundos y no bajaban un mango, tendrán sus razones pensé... Cierto grado de negación puede ser una buena razón. Otros se abrían a la oferta para ocupar sus lugares inactivos desde hacia meses. Así encontré una bella casa, con lugar para 5, nueva, a 10 minutos del centro. Y a 50 metros de una playa. El costo era mas que accesible.
El 1 de enero partimos. La nafta y todas las recomendaciones de viajeros, me hacían temer un poco. Tendría que demorar mi viaje detenido en medio de la nada esperando un camión de YPF?. Pero nada paso durante el primer tramo. Siempre conseguí nafta, super de YPF, la mas barata. Al llegar a Gral. Acha un hotel reservado por internet era precisamente lo que las fotos decían. Y su precio, soprendia gratamente.. Por la mañana cargue nafta en Acha sin problemas y asi todo el viaje, jamas debi transar con la Premiun , siempre conseguí super. Cosa muy útil ya que conocen los valores de ambas.
La geografía mutaba aceleradamente. La ruta del desierto y sus carteles exentos de sutilezas, mostraban autos volcados y un claro mensaje..."Se durmió y volcó.." Así de simple..¿y efectivo?
Los chicos en el asiento de atrás dormían, discutían, se reían, comían, se quejaban, querían ir al baño y se morían de calor a pesar del aire acondicionado. El puro aburrimiento traía estas actitudes. A veces eran graciosos, otras veces quería eyectarlos en medio del desierto. Los kilómetros desaparecían sin problemas. Jamas supere las velocidades máximas, siempre con luces encendidas y no como otros autos de alta gama que desafiaban la vida y la muerte. Parece que cuanta mas guita tenes sos mas boludo en la ruta o tu afortunada vida te hace creer que sos inmortal. El tema es que al chocar los airbag de ellos funcionan mejor que los paragolpes de plástico del Clio. Pero faltaba poco y pronto la ciudad desplegaría sus luces... Y no fue así. Los últimos tramos una nube densa oscurecía el Bosque Encantado, el Limay y al salir de la lomita y esperar deslumbrar a mis pasajeros con las luces de Bariloche solo encontré una gris pantalla que cubría todo. Pero no nos quejamos, ni perdimos la fe. La cosa recien comenzaba y percibiamos que todo seria mejor. (continuara)