miércoles, 18 de enero de 2012

Hacia Bariloche. 2° parte.


La casa era tal cual la habíamos visto en internet. Nos alegró saber que no nos habíamos equivocado. Dos pisos, coqueta, de color beige, de madera y con comodidades para 5. Tenia las típicas ventanas barilochenses, esas que diseñan los arquitectos que nada saben de airear casas y creen que porque es Bariloche siempre deben estar clausuradas. Como si los médicos no sugirieran ventilar los ambientes en toda estación. Pero ellos no lo saben, son arquitectos y mientras entre en el presupuesto todo vale. Que las ventanas no se abran..apenas unas pocas y chiquitas lo hacían, era preocupante, ya que el día amaneció con un pronostico de 30°. Una barbaridad para la ciudad y para las construcciones de pocas ventanas y ninguna aislacion térmica.. La casa en la parte alta era un horno de pizza y manteníamos la esperanza de que la noche trajera algún alivio. Creo que no faltara mucho hasta que un ejercito de instaladores de aires acondicionados invada la ciudad haciéndose un gran negocio. Todo cambia y lo antes impensado hoy es realidad. Ya vimos que en verano puede superarse fácilmente los 30°. Y luego bajarse a 9°, así como una gran broma de la climatología. Como sabía de estas situaciones habíamos sido muy estrictos en lo que los chicos cargarían en los bolsos. Todos llevábamos ropa de invierno y verano...o al menos eso creía . Los pesos estuvieron medidos severamente, antes de salir le había preguntado a cada uno cuanto pesaba y me miraban con cara sorprendida. También calcule cada bolso y así mantuve la seguridad del viaje al no sobrecargar mas de lo que el manual del usuario del Clio recomendaba..
Ademas le había cambiado pastillas de freno y regulado las luces, aunque esto ultimo lo hicieron espantosamente.. Trate de que la seguridad fuera primordial y así tuvimos un arrivo tranquilo y cómodo a la ciudad del clima enloquecido. Pero los 30° no me preocupaban...la playa estaba a solo 50 metros....me preocupaba lo que no vimos ni ese día ni varios que le siguieron... la ceniza...ausente sin aviso en una mañana de sol que recordaba las mejores postales barilochenses....
La cosas parecia prometedora... (continuara)

3 comentarios:

Anónimo dijo...

como siempre, un placer la lectura. en cuanto a la edificacion, no todo es asi, esa casa es de las tipicas chilenas del sur, diseñadas no por arquitectos, sino por albañiles glorificados. un beso y espero lo que sigue

Anónimo dijo...

como cornos pongo mi nombre? el comentario anterior es mio.

Alicia

Osvaldo dijo...

No tengo dudas que los habitantes de bariloche son personas únicas están dispuestas a tratar de gran manera al turismo, ya que saben que viven de eso