Cuando tuve la demencial idea de ponerme en contra del ridiculo Comandante del Irizar y escribir una carta de lectores a Clarin, que finalmente publicó,no me imaginaba que casi + de 100 tipos pudieran odiarme tanto. Algunos, por tan pocas frases escritas, creian conocerme desde siempre, mi familia, mis pensamientos, mis oscuros propositos. Y hasta se lamentaban de la educacion que le daba a mis hijos. Para ellos era un zurdito montonero, enemigo de los milicos, insensible que me entristecia porque no habia muertos en el barco y tantas boludeces mas que hacian la radiografia perfecta de un monstruo. Lo cierto es que ninguno de ellos me conocía, pero apenas 15 renglones ya habian dado de mi todo lo que podia saberse. Ah, no cuento en esto las amenazas..
Pero debo reconocer que la fantochada del comandante Tarapow fue vista no solo por mi sino por unos 20 tipos quienes con sus emailes me daban su apoyo. La que no lo hacia era la esposa del marinero quien tambien me escribio. Pobre mujer, luego de sentir pena por ella en el primer email recibido, en el segundo pase a sentir un inmeso repudio por una mujer que parecia estar mas contenta de tener un marido heroe, aunque se muriera, que uno vivo y en casa. Señora, existe el divorcio, no tiene que esperar que se incendie el rompehielo para deshacerse de su marido.. Tal vez la amorosa sra. ya se estaría vanagloriando con sus amigas sobre la Av. Almte. Post Morten Tarapow o el monumento que le erigirian con chapitas de coca fundidas a tan supremo rey del marketing personal.
Que bien se vendio el tipo...los prismaticos, la barba aguerrida, la mirada extraviada. Asi lo vimos al llegar..un loco del Borda parecia, le faltaba el medio zapallo en la cabeza.
Bueno, de esos intercambios epistolares me fue quedando gente con la que aun converso. Personas que si bien no pensaban como yo, sabian debatir sin pensar que lo hacian con el enemigo Nº 1 de la Republica. El caso del Almirante Molina Pico, por ejemplo, un tipo claro, logico y medido en el debate, y que no se atrevio a poner la manos en el fuego por su colega de armas. No como otros salames que compraron la historia de los diarios donde se competia en ver quien creaba primero un nuevo heroe nacional. Ni sabiamos si al tipo lo sorprendio el incendio en una noche de juerga, que ya estaban detallando situaciones que ni siquiera podiamos chequear, acciones heroicas, sacrificios, arrojo y demas virtudes marineras de ocasion. De pronto hablabamos de la Ley el Mar como si el barco fuera un corsario pirata y no uno de la Armada regido por otras leyes diferentes. En que inciso dira...el capitan muere con el barco...
Imbeciles, eso parece ser lo que da honor a estos inutiles, la muerte.
Veo que he utilizado tantas palabras para contar lo que sigue y que es nimio.
Resulta que una de estas personas es un sra. muy amable que si bien sabe que no coincidimos a veces, sigue escibiendome. Hace unos dias publicó una carta en Clarin donde relata un hecho que me hizo cagar de risa de solo imaginar la situacion. Parece que esta mujer, en un festejo en un restó de Belgrano, tuvo la urgencia de ir al baño. Hacia allí se dirigio cartera en mano, como hacen todas, y luego de elegir un box, cerró la puerta , colgó la carterita del gancho de la pared y se bajó la pollera, el pantalon, o lo que halla lucido esa noche, ah, tambien la bombacha, seguramente. Estaba en lo mejor escuchando el zumbido del chorrito amarillo cuando advirtió que una manito traviesa se metía por arriba de la puerta y en un rapido movimiento le descolgaba la cartera del ganchito...y se la afanaba!!
Nada para hacer, el chorro aun salía y aunque hubiera querido, jamás alcanzaria a la ¿ladrona? Ya saben como es, la bombacha, la medibacha, la pollera, el ganchito de atras, enderezarla para que quede derecha y salir. Demasiadas cosas. La caco (?) ya se habia dado a la fuga.
Entonces, señoritas de toda laya que leen este blog, ya saben. A mear abrazadas...a las carteras.
1 comentario:
y dale con Tarapow....
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