viernes, 5 de junio de 2009

Hasta pronto, pequeño saltamontes.

















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Tendria tal vez 14 años cuando la vi por primera vez. Promediaban los ´70 cuando aparecio en la tele B y N de entonces y jamas pudimos saber cuan bella era su fotografia, cuan pulidos eran sus planos ni tampoco sus escenografias casi teatrales. Hasta que la vimos en color. Desde la pantalla, un desgarbado y empobrecido protagonista era el heroe del asunto. ¿Pero podria ser posible que una serie donde se intentaba quebrar con todos los cliches que por ese entonces traian las series yanquis pudiera tener algun exito?
Nunca supe de numeros o si generó alguna ganancia y si era lo que esperaban sus productores. Lo que si supe fue que ese programa se metio bien profundo en nuestras fantasias, con un mensaje muy diferente al que soliamos recibir.
Kung Fu estaba interpretada por un joven David Carradine, un desconocido y autentico hippie, que antes de ser actor quiso ser granjero, pero la cosa no le duro mucho. Su destino polvoriento estaba en esos caminos del lejano oeste donde su personaje a veces la pasaria muy mal y pocas veces bien. Mientras tanto, desde nuestras casas nosotros viajabamos con el. Sentimos el calor de las marcas del dragon en sus antebrazos y fuimos tan veloces como él a la hora de quitarle el guijarro a su maestro . ¿Pero, cual era el merito de la historia?.
Romper, quebrar, mostrar otro estilo de show. Un serie que se filmaba con calidad en sus encuadres y en su iluminada fotografia, sus escenarios y sus actuaciones. Por alli paso una jovencisima Jodie Foster,con no mas de 8 años, para dejar en "Aletehia", ese era el nombre del capitulo, una memorable leccion de lo que es la verdad y hasta donde defenderla.
O algun otro, dirigido por quien luego se eternizara con el clasico "Fiebre del sabado por la Noche" o "En la mira de los Asesinos", John Badham.
La busqueda de Kwai Chang Caine no cesaba. Hijo de madre china y padre norteamericano intento ingresar al monasterio de Shaolin durante mucho tiempo sin exito. Varios fueron los dias donde el niño de 12 años, huerfano, permanecia a la intemperie a las puertas del templo esperando ser elegido para ingresar como estudiante. LLuvias, soles ardientes, no le quitaron la conviccion, extraño ejemplo en una serie de esa epoca y venida de los Estados Unidos.
Y luego, cuando el guijarro por fin es quitado de la mano de su maestro, Kwai ya esta listo para salir al mundo como un sacerdote y un triste suceso lo pone en fuga, llegando como un asesino, al lejano oeste norteamericano. Alli buscara a su hermanastro, su unica familia,,y entonces se precipitaran sus aventuras que serviran como ejemplo para reflexionar sobre la violencia, la paz, el amor o la verdad. Y tambien el racismo.
Kung Fu, fue una verdadera joyita que duro apenas dos temporadas. Transmitio una filosofia de vida, real o no, pero que siempre estaba del lado del amor o de la no violencia. La violencia confunde las cosas, dice uno de su personajes, confunde malos con buenos..Y tal vez sea cierto, cuantas veces la violencia saca lo peor de nosotros, aunque seamos pacificas personas....
Por estos caminos transitaba Kung Fu. Hoy aquel David Carradine no existe mas , se ahorco presumiblemente en un hotel de Bangkok; aquel que fuera el pacifico Kwai Chang Caine, pero tambien el imprevisible y sanguinario Bill, de Kill Bill, aquella obra superior de Tarantino.
Esta nota tal vez tuvo algunos guiños, pistas que gente de mi generacion seguramente entendio, para todos aquellos que quieran vivir aquellas aventuras de una epoca diferente y en una serie extraña, pueden hacerlo en http://www.seriesyonkis.com/ alli estan ambas temporadas de aquella mitica Kung Fu.
Y de aquel inolvidable actor que fue David Carradine.

1 comentario:

MaxD dijo...

Sí, ayer escuché la noticia... También supe ver aquella legendaria serie. No sabía que habían sido solo dos temporadas, parecía más. Y su mensaje anti-violencia era el leit-motiv sin duda. Sin embargo nunca se animó a confundir malos con buenos, hubiera sido demasiado. Teléfono para Jack Bauer.