lunes, 14 de abril de 2008

Medicos. parte 2


Francisco hace poco que llegó a Bariloche. El y toda su familia cambiaron la Capital Federal por esa ciudad de montaña, buscando un porvenir mas tranquilo.
Pero Francisco no logra adaptarse. Pronto comienza a sentirse mal, y sus días se vuelven difíciles. Todo lo que comía le caía horrible y pronto la situación se vuelve preocupante.

Consulta a varios médicos. Uno le da dieta, algunos remedios y rápidamente lo despacha; otro le manda análisis completos y en la segunda visita le dice que es urgente una operación de apéndice. Francisco no tiene apéndice desde los 18 años. La cara del medico se vuelve pálida. Rápidamente extiende unas pastillas recetadas y lo despide diciendo que ya no necesita volver.
La caravana de Francisco por los médicos termina en uno especial.
Francisco encuentra un profesional, que con un poco mas de tiempo lo escucha, lo mira, lo contiene. Entonces asume lo que le ocurre; que no soportaba el clima, el cielo siempre gris, lloviznas diarias, la frecuencia de los colectivos y tener solo un canal de televisión. Demasiado contraste para el pibe que venia de Recoleta. Este medico lo mira y luego de escucharlo le sugiere un remedio singular. "Te vas acá al lado, te comes un buen sanguche, el que vos quieras, te tomas un vasito de vino y tratas de pasarla bien....."
Los consejos siguen pero no en un papel recetado, sino en la voz de un medico que por fin le dispensa a Francisco algo que los médicos ya ni recuerdan.
El contacto con el paciente.
Pronto Francisco se recupera y comienza una adaptación normal.
¿Pero que pasa con los médicos de hoy?
Cada día mas rápidos, mas nerviosos y mas escasos de tiempo aceleran a los pacientes con pocas palabras y poco o nada de atención.
Manuel esta preocupado, quiere hacerse unos análisis y se acerca a una clínica pequeña de Lomas, su prepaga esta entre las mejores, sin embargo el medico que eligió, no.
Luego de mas de 1 hora y media de espera, a pesar de que tenia turno, el medico (y director de la clínica) que apenas farfulla un saludo, escucha el interés de Manuel de hacerse un análisis. El medico no habla, rápidamente escribe unas frases en el recetario y extendiéndosela le dice: "Hágase esto, buenas tardes".
Y nada mas. Ni siquiera un...” ¿Que le preocupa, UD. Fuma, como se siente, cuales son sus antecedentes familiares? Nada. Solo la orden de análisis y a otra cosa.
Una nota reciente afirma que en los próximos años la relación medico paciente estará colapsada. Me parece muy optimista la aseveración. Ya colapsó, y no por culpa de los pacientes. El argumento podría estar en lo mal pagados que están lo profesionales, esto jamás lo sabremos, y el temor de los juicios por mala praxis. Mientras tanto y como para revolver la olla aun mas, los médicos someten a sus pacientes-rehenes a largas demoras de mas de 2 hs , y esto a pesar de tener turno. Evitar el contacto lo mas posible, remediar con lo mas caro de los laboratorios mundiales. “Pruebe este medicamento" sugirió a un paciente el Dr. X. Lo que no aclaró es que el medicamento en cuestión era lo mismo que el anterior pero costaba 700% mas caro.
Esteban, en una clínica de Adrogue, tenia turno a las 5 p.m. “El medico llegó a las 7 y claro, tenia que atender los turnos anteriores. Resultado: me fui a las 10 de la noche y apenas me tuvo 5 minutos en la consulta”.
¿Será la codicia?, a mas pacientes mas dinero, serán los bajos pagos por cada consulta que según afirman realizan las prepagas, ¿será que la vocación se les ha acabado?
Mónica es médica hace más de diez años. Al atender a sus pacientes no solo les pregunta sobre que sienten físicamente sino que hasta se permite preguntarles por sus familias y amores, sus frustraciones y alegrías. Obviamente las consultas de Mónica tardan casi media hora o mas. Mónica soporta entonces la presión del sanatorio para que demore menos. Aun la triste secretaria que le asignaron la culpa de la falta de turnos, Porque...”Mónica tarda demasiado con los pacientes...”
¿Que hay que esperar para el futuro? Los médicos en algunos hospitales públicos están siendo maltratados por los pacientes en las guardias. Los fajan, se entiende.
Las cuestiones pueden ser estas pero también otras que no analizaremos aquí. ¿Habrá que maltratarlos un poquito en los grandes sanatorios privados para que sepan que se siente?
¿O habrá que dejar de enfermarse?.
Las vocaciones sin duda retroceden ante el avance de la codicia, de ganar mas metiendo mas paciente por hora, de generar mas análisis, estudios y medicación. “Que 7 millones de argentinos tomen psicotrópicos habla seguramente de la falta de dialogo entre pacientes y médicos”, dice Marcelo Peretta, director de la Escuela de Farmacia y Bioquímica de la Universidad Maimónides.
Y bueno....
Habrá que volver al brujo.

6 comentarios:

MaxD dijo...

Buen relato. Te puedo contar que heredé una predisposición a la presión alta, que ¿por suerte? detectaron cuando tenía 16 años. Desde entonces no dejaron de asustarme y por supuesto mi presión se mantuvo alta (profecía autocumplida), me estudiaron, me medicaron, me dijeron "tenés que tranquilizarte". Me tocó un cardiólogo de esos que pedís turno a las 6 pm y te atiende a las 11 de la noche. Una vez casi se queda dormido cuando me dedicaba mis 5 minutos mensuales ("pobre" pensaba "cuánto que trabaja", el muy hdp). Casi pierdo un laburo porque en el preocupacional el "dotor" me dijo que no podía darme el apto ya que con esa presión moriría en cualquier momento y él no podía hacerse cargo de eso. A la salida fui a ver a mi médico y tenía la presión normal, volvía al laboral y la tenía alta de nuevo (así tres veces). Hasta que dí con un cardiólogo que me dijo "no tenés nada, solo te ponés nervioso cuando te toman la presión, mirá te tomo de nuevo y ya baja". Desde entonces no tuve presión alta. Por suerte en Bariloche encontré un cardiólogo que opina lo mismo.

Sol dijo...

Excelente relato, Fabián. Es cierto, hay médicos, y gracias al cielo no son todos, que con las justas si te miran a los ojos y te hablan. Yo tuve uno así, inmediatamente me cambié de doctor. La primera vez que lo conocí ni se prensentó ni me preguntó nada de mí y al toque me recetó algo para alergia. Qué porquería de doctor!! El que tengo ahora es bueno, conversamos. Me pregunta de mis antecedentes familiares. Me gusta.

Es una vaina, hay que hacer todo un estudio a la hora de elegir un médico. Tengo una amiga que está apunto de graduarse de la escuela de medicina y me dice que ellos tienen clases donde les enseñan cómo tratar a los pacientes. Vienen actores y fingen enfermedades y ellos tiene que tratarlos humanamente, respetuosamente, como gente pues. Por lo menos, hay colegio médicos que se dan cuenta lo importante que es esto. Claro, ya cuando salen los doctores y se ponen a trabajar... las cosas cambian, no? Es una lástima.

Volveremos al brujo pues, ni modo.

Anónimo dijo...

Los brujos, la medicina alternativa creo que es parte de la respuesta a estos medicos inescrupulosos e inhumanos, la medicina alternativa se aprovecha de esto y surge como la panacea a todos los males.
Queda en nosotros el poder dicernir, cuando no sabemos mucho y tenemos ansias de creer, es muy dificil, pero son los tiempos que estamos atravesando, ahora sabemos que los medicos se equivocan antes ni lo sospechabamos...
Mi papà pasò sus ultimos nueve dias en terapia intensiva, los primeros 3 consciente de mantener las charlas finales, los ultimos 6 dìas amordazado a un respirador, atado a una cama, pagando culpas y pidiendo morir en paz, seguramente tuve parte de responsabilidad, pero el medico no fue menos responsable.
gracias doctor.

KLAU dijo...

.."El argumento podría estar en lo mal pagados que están lo profesionales, esto jamás lo sabremos, y el temor de los juicios por mala praxis"...

PARA NO PRACTICAR LA "MALA PRAXIS" PRIMERO HAY QUE SABER, LUEGO BAJARSE UN POCO DEL CABALLO, DESPUES TRATAR CON EL PACIENTE NO CON EL CLIENTE...YA QUE NO VOY AL MEDICO A COMPRAR UN CHURRASCO SINO A QUE OPEREN A MI HIJO.. POR CITAR UN EJEMPLO MAS QUE REAL.

CUANDO NACIO MARTIN TANTAS FUERON LA SARTAS DE PELOTUDECES, NEGACIONES, EVASIVAS QUE RECIBIA QUE DEJE DE PREGUNTAR A SUS PROPIOS MEDICOS PARA DEDICARME A INVESTIGAR Y DECIDIR POR MI CONOCIMIENTO, HE PRESENCIADO HASTA CLASES MAGISTRALES DE NEUROLOGIA EN LA UBA CON MARTIN EN EL PORTA BEBES PARA LUEGO HABLAR CON MEDICOS UN TANTO MAS QUE PREPARADOS TAMBIEN CON BASTANTE APURO EN LLEGAR, AL BAR, O A LA SWISS MEDICAL O A LA SUIZO ARGENTINA PORQUE NO? SI TIENEN UNA LINDA CANCHA DE TENNIS PARA QUE LOS DOCS SE DESESTRECEN !!! QUE CARAJO IMPORTA SI DAN BUENA ATENCION SI TOTAL LOS PELOTUDOS PAGAN LA CUOTA PARA QUE ELLOS SIGAN TENIENDO TARJETAS GOLD Y SUS CENAS OPULENTAS EN MADERO?
NUEVAMENTE LA DOLOROSA MENTALIDAD ARGENTINA

DR.ILLIA NO SE LEVANTE, QUEDESE CON LOS ANGELITOS NO SE GASTE !!!!

KLAU

Anónimo dijo...

Creo que me perdí la de Médicos. Parte 1. Quería agregar otra cosa a la historia de Francisco, alguien me contó que el ultimo medico que al que fue a ver, también le recomendó apuntarse a un curso o seminario o lo que sea para conocer gente, hacer amigos, que ese era uno de sus grandes males. Y quería acotar esto porque creo que la falta de amigos, la falta de gente con quien poder desahogarse es uno de los grandes males de la actualidad.
Y para quien habla en su comentario de la "dolorosa mentalidad argentina", le digo que lamentablemente no es asi, en España los médicos son igualitos, los tiempos de espera son igualitos y son igualitos de pedantes, indiferentes y poco empaticos como allá. Es un mal global!!

El Tour de Rita dijo...

Fabian:

Donde manda capitan...
Lamentablemente, la pobreza tiene estas concecuencias.

Encontar un buen doctor es tan o mas dificil como ganarse la loteria. Pero en mi caso, varias veces gane la loteria, porque conoci muchos y muy buenos doctores. Por ejemplo, en un caso de emergencia que tuve con mi mama, el hospital Gandulfo (si leiste bien, el tristemente celebre Hospital Gandulfo) literalmente le salvo la vida.

El dato, creo yo, es ir donde hay muchos pacientes y que tarde por lo menos media hora con cada uno.. y no lo digo en broma.

Javier